Una noticia de fuentes externas- Una publicacion en progreso de Wall Street Journal,
Una cortesia del blog educativo de noticias del Lic. Enildo E Rodriguez Nunez, MBA, PhDP
COORDINACION INTERNACIONAL DE COMUNICACIONES EN REDES E INFORMATICA
Xi busca calmar las ansiedades de los CEO estadounidenses
CEl líder chino, Xi Jinping, que enfrenta una economía en desaceleración y una fuerte caída en la inversión extranjera, trató de tranquilizar a los jefes ejecutivos estadounidenses de que la economía de China no ha tocado techo y que el país está trabajando para mejorar su entorno empresarial.
En una reunión con un grupo de más de una docena de líderes empresariales y académicos estadounidenses el miércoles, Xi también dijo que los dos países deberían hacer más para superar sus diferencias y aumentar las interacciones, según la emisora estatal China Central Television.
La reunión en el Gran Salón del Pueblo en Beijing incluyó a los jefes de dos fabricantes de chips, Cristiano Amon de Qualcomm y Hock Tan de Broadcom. Stephen Schwarzman, de Blackstone, Evan Greenberg, de la aseguradora Chubb, y Raj Subramaniam, de FedEx, también asistieron, según lecturas e imágenes de CCTV.
Las fricciones entre Washington y Pekín sobre comercio, tecnología, derechos humanos y una serie de otros temas han acelerado el desmoronamiento de los lazos corporativos entre las dos economías más grandes del mundo. La inversión extranjera en China cayó un 8% en 2023 con respecto al año anterior en términos de yuanes, y el descenso se ha pronunciado en los dos primeros meses de este año. Eso se produjo cuando el crecimiento económico de China cayó a uno de los niveles más bajos en décadas en 2023, con un 5,2%.
En un guiño a las cifras desalentadoras, Xi evocó los desafíos que la economía de China había superado anteriormente a pesar de las predicciones de expertos externos de que estaba condenada al colapso.
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"En el pasado, no colapsó debido a los rumores de que colapsaría, y ahora, no alcanzará su punto máximo, solo porque se habla de que ha alcanzado su punto máximo", dijo, según una lectura de CCTV. Las imágenes de CCTV mostraron al líder chino sonriendo ampliamente y luciendo inusualmente optimista mientras hablaba sobre el valor de un mayor compromiso, adoptando un tono más complaciente que en una reunión con líderes empresariales estadounidenses el año pasado.
La lectura oficial de los comentarios de Xi no incluyó ninguna referencia a las preocupaciones de seguridad que los grupos empresariales extranjeros habían planteado anteriormente, incluida una serie de redadas en oficinas y detenciones de personal que sacudieron a la comunidad empresarial extranjera.
La reunión, de la que informó anteriormente The Wall Street Journal, subraya lo mucho que está en juego para China, que necesita la aceptación continua de las multinacionales mientras intenta sacudirse la resaca de su aislamiento pandémico autoimpuesto.
Casi al mismo tiempo que la reunión de Xi con los directores ejecutivos, el subsecretario de Estado, Kurt Campbell, habló por teléfono con un alto diplomático chino, el viceministro Ma Zhaoxu, dijeron ambos gobiernos. El Departamento de Estado dijo que la llamada era "parte de los esfuerzos en curso para mantener abiertas las líneas de comunicación", y señaló que tocó la relación bilateral, los asuntos regionales, además de las áreas de diferencia y cooperación, así como la península coreana y Taiwán y Rusia. El comunicado dice que Campbell también expresó su preocupación por el "apoyo chino a la base industrial de defensa rusa".
La interacción con Xi también se produce en un momento en que las empresas estadounidenses se ven presionadas por la geopolítica, con sectores que van desde los automóviles hasta los aviones que luchan por seguir siendo competitivos frente a la política industrial china. El comercio de semiconductores también se ha visto afectado por las estrictas restricciones a la exportación de Estados Unidos, lo que ha llevado a Qualcomm y a otros en la industria de chips de Estados Unidos a advertir sobre la disminución de las ventas.
El mensaje de tranquilidad de Xi siguió a un discurso pronunciado el domingo por el primer ministro chino, Li Qiang, en el Foro de Desarrollo de China, una reunión anual de negocios y economía en Beijing, en el que promocionó el enorme mercado de la nación y las perspectivas de crecimiento a largo plazo. Algunas de las empresas que enviaron ejecutivos a reunirse con Xi, incluidas Broadcom, FedEx y Chubb, son los principales patrocinadores del Foro de Desarrollo de China.
La lista de estadounidenses que se reunieron con Xi también incluyó a Stephen Orlins, presidente del Comité Nacional de Relaciones entre Estados Unidos y China; Craig Allen, presidente del Consejo Empresarial Estados Unidos-China; y John Thornton, copresidente de Asia Society.
Según CCTV, la delegación estadounidense le dijo a Xi que encontrar una manera de coexistir pacíficamente beneficiaría el desarrollo de ambos países. Los asistentes estadounidenses no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios. Estados Unidos y China registraron 575.000 millones de dólares en comercio bilateral el año pasado.
Xi se había reunido con algunos de los asistentes, incluidos Schwarzman, de Blackstone, y Greenberg, de Chubb, en una cena con jefes corporativos estadounidenses y otros en noviembre en San Francisco, al margen de una cumbre con el presidente Biden. En esa reunión, Xi buscó la ayuda de las corporaciones estadounidenses para aliviar las tensiones bilaterales, pero en particular no mencionó la inversión ni ofreció palabras de tranquilidad para las empresas que enfrentan un entorno más difícil en China.
Cuando se llevó a cabo esa cena, Mike Gallagher, presidente de un Comité Selecto de la Cámara de Representantes sobre China, exigió que los dos principales patrocinadores del evento revelaran los nombres de quienes pagaron los miles de dólares necesarios para asistir.
Las empresas estadounidenses se enfrentan a una disminución de los ingresos de China a medida que se intensifica la competencia local y se desacelera el gasto de los consumidores. La proporción de todos los ingresos de las empresas obtenidas en China pertenecientes a empresas estadounidenses cayó al 10% en 2020 desde el 16% en 2006, según el McKinsey Global Institute.
Aun así, las últimas cifras económicas muestran algunas señales de que la economía puede estar estabilizándose. Los beneficios industriales aumentaron más de un 10% en los dos primeros meses de 2024, frente al descenso del 2,3% de todo el año 2023. Las ganancias de las empresas extranjeras aumentaron un 31%.
Grace Zhu contribuyó a este artículo.
Escribe a Yoko Kubota en yoko.kubota@wsj.com y a Liza Lin en liza.lin@wsj.com
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