viernes, 25 de febrero de 2011

EL DESPERTAR POLITICO GLOBAL , AFRICA, Y EL DESPOTISMO DEMOCRATICO

¿Túnez pasará de la Tiranía al Despotismo Democrático?

El Norte de África y el Despertar Político Global


Ha pasado un mes y medio desde que el presidente y dictador Zine El Abidine Ben Alí huyó de Túnez, desencadenando desobediencia civil y protestas que han dado como resultado la caída de uno de los dictadores más fuertes y más duraderos del mundo árabe, Hosni Mubarak. Pero, ¿cómo se encuentra Túnez hoy en día, y hacia dónde se dirige a futuro?

En la Primera Parte de esta serie, me hice la pregunta, "¿Somos testigos del comienzo de una Revolución Global?" Llegué a la conclusión de que estamos presenciando el surgimiento de una fase de vasto alcance en lo que será un largo camino hacia la revolución mundial, impulsado en mayor medida por lo que se conoce como "Despertar Político Global".

El 'Despertar' es impulsado por la revolución de la información y las comunicaciones, donde personas de todo el mundo, y, en particular en el "Tercer Mundo" se vuelven crecientemente conscientes de su falta de libertad, explotación económica, opresión y falta de respeto. En concreto, los jóvenes educados son la fuerza impulsora, y la búsqueda de dignidad humana es el impulso conductor.

En la Segunda Parte de esta serie, analicé cómo la estrategia imperial estadounidense ha cambiado en los últimos años para apoyar la democratización en el mundo árabe, no por algún escrúpulo humanitario respecto a apoyar a tiranos opresores y despiadados, sino por un interés estratégico para garantizar el control y la hegemonía a largo plazo sobre la región.

La estrategia de "democratización" es un método para controlar y gestionar el proceso y los problemas inherentes al despertar político global. Sin embargo, los estrategas y think tanks estadounidenses han dejado claro que prefieren una estrategia de democratización basada en "evolución, no revolución".

Así, cuando comenzaron insurrecciones y revoluciones, los estrategas imperiales de Estados Unidos se apresuraron a reaccionar para tratar de controlar la situación.

El objetivo es, entonces, mitigar y manejar el proceso de cambio, promoviendo la idea de "gobiernos de unidad" o de "transición", para que Estados Unidos pueda gestionar la transición hacia un sistema democrático que sea seguro para los intereses occidentales, y produzca una élite política subordinada a Estados Unidos y a las instituciones financieras occidentales como el Banco Mundial y el FMI.

Esta parte de la serie, "El Norte de África y el Despertar Político Global", es un breve examen de la estrategia implementada en Túnez para prevenir y, posteriormente, gestionar el levantamiento que se desarrolló, y hacia donde probablemente podría llegar.

Estados Unidos anticipa problemas en Túnez

De acuerdo a los cables diplomáticos de Wikileaks sobre Túnez, la cuestión de la sucesión del régimen de Ben Alí en Túnez se estaba debatiendo en la Embajada de Estados Unidos en 2006. Sin embargo, en ese momento, el embajador señaló que, "ninguna de las opciones sugieren que Túnez será más democrático, pero la relación bilateral entre Estados Unidos y Túnez probablemente no se verá afectada por la partida de Ben Alí.

Se comentó que si el Presidente estaba "temporalmente incapacitado" (refiriéndose fundamentalmente a su lucha contra el cáncer), entonces "podría otorgar algunas medidas de autoridad presidencial al primer ministro Mohamed Ghannouchi." El Embajador señaló que los tunecinos en general ven a Ghannouchi "con respeto y que es bien visto en comparación con otros funcionarios del GOT [Gobierno de Túnez]" y funcionarios del partido. [1] Ghannouchi posteriormente fue la persona que intervino como presidente interino una vez que Ben Alí huyó en 2011, pero tuvo muy poco apoyo entre el pueblo, quienes exigían su renuncia también.

En un cable de 2008 relacionado con una reunión con el Presidente Ben Alí, se señaló con ironía que Ben Alí consideró que la situación en Egipto era "explosiva" y que "tarde o temprano, la Hermandad Musulmana se haría cargo. Añadió que Yemen y Arabia Saudita también se enfrentan a problemas reales", haciendo hincapié en que toda la región en general era "explosiva".

En julio de 2009, un cable diplomático de la embajada norteamericana en Túnez señaló que Túnez estaba "complicado" y que "muchos tunecinos se sienten frustrados por la falta de libertad política y enojado por la corrupción de la familia presidencial, el alto desempleo y las desigualdades regionales.

" El embajador señaló que si bien Estados Unidos buscaba mejorar relaciones comerciales y militares con Túnez, también hay mayores contratiempos, ya que "hemos sido bloqueados, en parte, por un Ministerio de Asuntos Exteriores, que busca controlar todos nuestros contactos en el gobierno y muchas otras organizaciones." Estados Unidos había logrado con éxito una serie de objetivos, tales como" aumentar sustancialmente la ayuda estadounidense a los militares", y "fortalecer los lazos comerciales", sin embargo, "también hemos tenido muchos fracasos".

Túnez había descartado participar en programas regionales de la USAID "para ayudar a los jóvenes", y también "redujo el número de becarios Fulbright", que era una sugerencia estratégica específica adoptadas por informe del Council on Foreign Relations de 2005 para apoyar la "democratización" del mundo árabe.

Además, el Embajador señaló, el gobierno tunecino "hace difícil" a la Embajada mantener contacto "con un amplio sector de la sociedad tunecina", y añadió que los documentos de propiedad del gobierno "a menudo atacan a activistas de la sociedad civil tunecina que participan en actividades de la Embajada, retratándolos como traidores." El gobierno también dejó muy claro que no aprobaba el contacto de la oposición con la Embajada, "así como de activistas de la sociedad civil que critican al régimen.

Al plantear la pregunta de - "¿qué debemos hacer?" - el embajador explicó que Estados Unidos tenía "un interés en mantener a los militares tunecinos profesionales y neutrales", así como de "promover una mayor apertura política." La Embajada enfatizó "la necesidad de mantener contactos con los partidos de oposición y algunos grupos de la sociedad civil críticos al régimen." Además, el Embajador destacó la necesidad de movilizar a los europeos para ayudar a impulsara la "reforma", puesto que "países clave como Francia e Italia se han rehusado a poner presión sobre el GOT." El embajador señaló que en última instancia, "un cambio serio aquí tendrá que esperar la salida de Ben Alí.

Muchas organizaciones de promoción democrática estadounidense habían establecido vínculos con organizaciones de la sociedad civil y líderes de oposición tunecina durante los últimos años, incluyendo la National Endowment for Democracy (NED), Freedom House, y el National Democratic Institute (NDI)

"Democratizando" Túnez"

Como vemos en el curso de los acontecimientos en Túnez, la estrategia de Estados Unidos de promover la democracia no necesariamente iba según lo planeado. Como hiciera hincapié el Grupo de Trabajo del CFR en el año 2005, "El objetivo de Estados Unidos en Medio Oriente debe ser promover la evolución democrática, no la revolución." [6] Esto quedó claro cuando el levantamiento pilló a los Estados Unidos con la guardia un poco baja.

Después de la autoinmolación de Mohamed Bouazizi el 17 de diciembre de 2010, Túnez estalló en protestas, inspiradas por el alza de precios de los alimentos, la insatisfacción con la corrupción, la falta de libertades, y el desempleo. Las protestas se enfrentaron a la brutalidad policial, y estaban recibiendo poca o ninguna cobertura en los medios de comunicación internacionales.

Una característica distintiva del "cambio de régimen" democrático patrocinado por Estados Unidos es contar con los medios occidentales jugando un papel muy importante desde el momento en que las protestas comienzan; sin embargo, los medios occidentales no prestó atención alguna hasta que el presidente Ben Alí huyó el 14 de enero de 2011.

El primer ministro Mohamed Ghannouchi luego asumió el cargo de presidente interino, entregando el cargo de presidente interino al vocero del parlamento, Fouad Mebazaa, al día siguiente. Fouad Mebazaa entonces le pidió al primer ministro formar un "gobierno de unidad", diciendo que "sea un gobierno de unidad nacional por el mejor de los intereses del país.

Inmediatamente después de que Ben Alí huyera, el ejército tunecino se desplegó en las calles para "mantener el orden" enfrentando los disturbios y saqueos que estallaron. Muchos culparon de los disturbios y saqueos a milicias que "forman parte del ministerio del interior, o miembros de la policía, y son coordinados por los jefes de policía y de inteligencia en Túnez.

En pocos días, fue anunciada la formación de un gobierno de unidad, y prometió "trabajar hacia la democracia", lo que llevó a unirse a varios líderes de oposición: "se espera que Ahmed Ibrahim, jefe del partido Ettajdid, Najib Chebbi, fundador del partido de oposición PDP, y Mustafa Ben Jaafar, líder de la Unión de la Libertad y Trabajo, mantengan una cita de alto nivel." Ibrahim fue citado diciendo: "Lo principal para nosotros ahora es detener todo este desorden.

Estamos de acuerdo en varios principios respecto al nuevo gobierno." [9] Najib Chebbi, líder del partido de la oposición PPD y miembro del "gobierno de unidad", es un abogado que "siempre ha sido visto por los diplomáticos occidentales como la más creíble figura de oposición." [10] El "gobierno de unidad", anunció que tenía previsto celebrar elecciones dentro de 6 meses.

Sin embargo, el público en las calles no estaba satisfecho con la creación de un "gobierno de unidad" que mantiene muchos vestigios del régimen de Ben Alí, con algunos activistas afirmando que: "El nuevo gobierno es una farsa.

Es un insulto a la revolución que costó vidas y sangre." [11] Los militares jugaron un papel importante en el levantamiento de Túnez, sobre todo por haberse negado a disparar contra los manifestantes, lo que llevó a Ben Alí a huir al día siguiente. Dos días después de la salida de Ben Alí, un periódico egipcio informó que el Jefe del Ejército Rachid Ammar estaba en contacto inmediato con la embajada norteamericana en Túnez, según un oficial de la Guardia Nacional de Túnez, y que la Embajada de Estados Unidos dio instrucciones a Ammar "para hacerse cargo de los asuntos de Túnez, si la situación se sale de control.

De hecho, el jefe del Ejército Rachid Ammar se comprometió a "defender la revolución". Ammar le habló a los manifestantes el 24 de enero, mientras los manifestantes exigían la dimisión del gobierno de unidad. Advirtió a los manifestantes, "Nuestra revolución, su revolución, la revolución de los jóvenes, arriesga ser perdida... Existen fuerzas que están pidiendo un vacío, un vacío de poder. El vacío que trae el terror, lo que lleva a la dictadura.

En otras palabras, los militares buscaban apoyar al "gobierno de unidad", y utilizar su reputación entre el pueblo para conseguir que lo apoyaran también. Coincidentemente, el Secretario de Estado Adjunto de EEUU para Asuntos del Cercano Oriente (el enviado estadounidense en Oriente Medio) Jeffrey Feltman, viajó a Túnez el mismo día que el general Ammar habló a la multitud, supuestamente para "expresar el apoyo de Estados Unidos al pueblo tunecino," y evaluar "cómo Estados Unidos podía ayudar" con la "transición".

Feltman, "dijo que el gobierno de Obama podría ser útil para brindar apoyo y preparativos para las próximas elecciones de Túnez a través de organizaciones no gubernamentales estadounidenses que han ayudado a otros países que carecen de una historia previa de permitir un proceso libre y justo." El portavoz del Departamento de Estado, P.J. Crowley declaró que el gobierno de unidad está "tratando de ser sensible", y que, "es un gobierno que está tratando de responder a las aspiraciones de su pueblo.

En otras palabras, los funcionarios estadounidenses están profundamente involucrados en el intento de legitimar el "gobierno de unidad" tunecino, con el fin de celebrar elecciones en seis meses, cuando Estados Unidos pueda asegurarse el control de los resultados.

Por lo tanto, Estados Unidos está interesado en contener la revolución, probablemente presionando al General Ammar para tratar de razonar con los manifestantes, así como apoyar el gobierno de unidad en sí. Como declaró el enviado estadounidense, Feltman: "Lo que le va a dar credibilidad a cualquier gobierno real... son las elecciones", y "Para llegar a elecciones creíbles después de tener un sistema que restringió tanto el papel de la sociedad civil y los partidos políticos... va a tomar algún tiempo y esfuerzo." En otras palabras, Estados Unidos está tratando de detener la "revolución" y mantener y gestionar la "evolución" hacia un gobierno democrático que puedan controlar finalmente, tal como sugiere el Informe del Grupo del CFR. Como declaró uno de los manifestantes tunecinos: "Alguien está robando nuestra revolución.

El reconocimiento de Feltman de la necesidad de construir una sociedad civil más eficaz antes de las elecciones proporciona apoyo a las revelaciones de los cables diplomáticos respecto a que el gobierno de Ben Alí en Túnez obstaculizó severamente los esfuerzos estadounidenses para promover grupos de la sociedad civil tunecina. Por lo tanto, yo no creo que sea apropiado ver el levantamiento de Túnez como "maquinado en Estados Unidos", puesto que Estados Unidos fue finalmente pillado, sin preparación.

Zalmay Khalilzad, ex embajador estadounidense en Irak, Afganistán y Naciones Unidas bajo la administración de George Bush, así como miembro de la junta de la organización de "promoción democrática", National Endowment for Democracy (que financió y apoyó las "revoluciones de color" en Europa del Este y Asia Central), escribió un artículo editorial en el Financial Times, señalando que el levantamiento en Túnez muestra el potencial de los nuevos medios para empoderar a ciudadanos descontentos, así como demostrar "el surgimiento de una nueva clase política: los jóvenes que no defienden la tiranía secular ni el radicalismo islámico". Si bien colma de elogios retóricos a una victoria de la "democracia", Khalilzad articuló como sugerencia "una nueva agenda de libertad para la región":

Occidente también presionar abiertamente a otros regímenes autoritarios para liberalizar, en calidad de parteras para la reforma democrática. En los países donde los movimientos islamistas están mejor organizados que los liberales, Occidente debería centrarse en el desarrollo de grupos de sociedad civil, partidos e instituciones moderadas en lugar de llamar a elecciones anticipadas.

Más importante, la distribución de nuestra ayuda exterior debe reflejar y promover estas prioridades. Regímenes y reformistas en toda la región están tomando nota de los acontecimientos en Túnez. Estados Unidos y Europa tienen que actuar con rapidez. [16]
Entonces, ¿qué son estas organizaciones de "promoción democrática"? Las tres más prominentes son Freedom House, el National Democratic Institute y la National Endowment for Democracy.

Uno de los anteriores presidentes de Freedom House fue James R. Woolsey, ex director de la CIA.

El actual presidente es William H. Taft IV, ex Subsecretario de Defensa, ex embajador de Estados Unidos ante la OTAN, y ex director jurídico asesor del Departamento de Estado. La membresía de la Junta de Freedom House incluye a personas asociadas en el pasado o actualmente con: el Departamento de Estado de Estados Unidos, el Council on Foreign Relations, Citigroup, Warburg Pincus, AFL-CIO, Morgan Stanley, la Brookings Institution, Visa, USAID, y The Associated Press [18].

La Presidente de la junta directiva del National Democratic Institute (NDI) es Madeleine Albright. Otro miembro notable de la junta es James Wolfensohn, ex presidente del Banco Mundial, y ex integrante de la junta directiva de la Fundación Rockefeller y el Population Council .

La National Endowment for Democracy (NED), fue fundada por Ronald Reagan en 1983 con el objetivo de "promover la democracia"; registrada como una organización privada, casi todos sus fondos provienen de la Congreso de Estados Unidos. Uno de los fundadores de la NED, Allen Weinstein, dijo una vez que, "Mucho de lo que [la NED] hace hoy en día, lo hacía encubiertamente la CIA hace 25 años.

" [20] Miembros notables de la junta directiva incluyen a Kenneth Duberstein, Director General del Grupo Duberstein, y miembro de los consejos de Boeing, Fannie Mae, y el Council on Foreign Relations; Francis Fukuyama, autor de "El Fin de la Historia"; William Galston, investigador senior de la Brookings Institution; Zalmay Khalilzad, Consejero del Center for Strategic and International Studies (CSIS), ex embajador estadounidense en Irak, Afganistán, Naciones Unidas, y ex funcionario del Departamento de Defensa; Larry A. Liebenow, ex Presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, y que ha servido en la junta del Council of the Americas (fundado por David Rockefeller, quien permanece como presidente honorario), el embajador Princeton Lyman, investigador principal en el Council on Foreign Relations, ex subsecretario de Estado para África, ex embajador en Nigeria, ex embajador en Sudáfrica, ex director de la USAID; Moisés Naím, asociado senior a la Carnegie Endowment for International Peace, ex director del Banco Central de Venezuela, ex director ejecutivo del Banco Mundial, y miembro de los consejos del Population Action International y el International Crisis Group; y Vin Weber, de la junta del Council on Foreign Relations, y coautor con Madeleine Albright del Informe de Grupo del CFR sobre la reforma en el mundo árabe [21]

Un mes después de la salida de Ben Alí, los tunecinos quedan con más libertades políticas, sin embargo, todavía hay gran preocupación por el camino del cambio que tiene lugar, "con la vieja guardia de Túnez todavía fuerte y las autoridades provisionales a menudo abrumadas - muchos dijeron que temen los cambios prometidos puedan ser dejados de lado." Una líder de un grupo de oposición en Túnez declaró que, "No hay voluntad política clara de ruptura con el pasado.

Las decisiones del gobierno han venido con retrasos que han dañado su legitimidad y provocaron una crisis de confianza." Por lo tanto, "algunos temen que la revolución será confiscada, su potencial perdido detrás de una cortina de humo de las reformas." [22] Sin embargo, una cosa ha cambiado claramente en Túnez; el desarrollo de un sentimiento y gusto por la libertad. Una vez que el sabor maravilloso e inherentemente humano de la libertad se siente, es increíblemente difícil de eliminar, y se vuelve en mucho menos tolerante a los métodos destinados a controlarlo.

Esto por tanto una situación muy esperanzadora como muy precaria. El cambio siempre está. La verdadera pregunta es si esta "transición" traerá verdadera libertad y democracia verdadera, o si se va a mantener "libertad y democracia neoliberales", que equivalen a una especie de despotismo democrático, donde la democracia se convierte simplemente en votar entre facciones rivales de elites que sirven a los mismos intereses imperiales extranjeros.

¿Podría Túnez ser potencial testigo de una democracia populista, como las que se han extendido por toda América Latina? ¿O sucumbirá a la versión estadounidense de la democracia? Sólo el tiempo, al parecer, será capaz de responder a esa pregunta. Como siempre, las probabilidades están en contra del pueblo, pero una vez más, como han demostrado al mundo los acontecimientos de los últimos 30 días, el pueblo siempre puede desafiar las probabilidades.

Por Andrew Gavin Marshall

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Andrew Gavin Marshall es investigador asociado de Centre for Research on Globalization (CRG). Es coeditor, con Michel Chossudovsky, del reciente libro "La Crisis Económica Global: La Gran Depresión del Siglo XXI", disponible en Globalresearch.ca. Está actualmente preparando un libro sobre el "Gobierno Global".


Original en: Global Research
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Notas

[1] Embassy Tunis, SUCCESSION IN TUNISIA: FINDING A SUCCESSOR OR FEET FIRST?, Wikileaks Cables, 9 January 2006: http://213.251.145.96/cable/2006/01/06TUNIS55.html

[2] Embassy Tunis, PRESIDENT BEN ALI MEETS WITH A/S WELCH: PROGRESS

ON COUNTER-TERRORISM COOPERATION, REGIONAL CHALLENGES, Wikileaks Cables, 3 March 2008: http://213.251.145.96/cable/2008/03/08TUNIS193.html

[3] Embassy Tunis, TROUBLED TUNISIA: WHAT SHOULD WE DO?, WikiLeaks Cables, 17 July 2009: http://213.251.145.96/cable/2009/07/09TUNIS492.html

[4] Embassy Tunis, TROUBLED TUNISIA: WHAT SHOULD WE DO?, WikiLeaks Cables, 17 July 2009: http://213.251.145.96/cable/2009/07/09TUNIS492.html

[5] NED, Tunisia, National Endowment for Democracy: http://www.ned.org/where-we-work/middle-east-and-northern-africa/tunisia;

FH, New Generation of Advocates: Empowering Civil Society in Middle East and North Africa, Freedom House: http://www.freedomhouse.org/template.cfm?page=66&program=83;

NDI, Tunisia, National Democratic Institute: http://www.ndi.org/tunisia

[6] Madeleine Albright and Vin Weber, In Support of Arab Democracy: Why and How. (Council on Foreign Relations Task Force Report, 2005), page 4

[7] ELAINE GANLEY and BOUAZZA BEN BOUAZZA, Tunisia's interim president backs a unity govt, AP, 16 January 2011: http://apnews.myway.com//article/20110115/D9KOQT000.html

[8] Al-Jazeera and agencies, Army on streets amid Tunisia unrest, Al-Jazeera, 15 January 2011: http://english.aljazeera.net/news/africa/2011/01/2011115135844457245.html

[9] Kim Sengupta, Political vacuum filled by chaotic in-fighting, The Independent, 17 January 2011: http://www.independent.co.uk/news/world/africa/political-vacuum-filled-by-chaotic-infighting-2186293.html

[10] Agencies, Ben Ali's possible successors, Al-Jazeera, 15 January 2011: http://english.aljazeera.net/indepth/spotlight/tunisia/2011/01/20111151464566226.html

[11] AJ, Tunisia's new government in trouble, Al-Jazeera, 18 January 2011: http://english.aljazeera.net/news/africa/2011/01/2011118194731826312.html

[12] ALM, Tunisian officer: Washington tells dismissed chief of staff to 'take charge', Al-Masry Al-Youm, 16 January 2011: http://www.almasryalyoum.com/en/news/tunisian-officer-washington-tells-dismissed-chief-staff-take-charge

[13] AJ, Tunisia cabinet to be reshuffled, Al-Jazeera, 24 January 2011: http://english.aljazeera.net/news/africa/2011/01/2011124163051778391.html

[14] Stephen Kaufman, U.S. Supports Tunisia’s Political Transition, America.gov, 24 January 2011: http://www.america.gov/st/democracyhr-english/2011/January/20110124162333nehpets0.8809168.html?CP.rss=true

[15] Borzou Daragahi, Key diplomat says U.S. approves of Tunisia revolt, Los Angeles Times, 25 January 2011: http://articles.latimes.com/2011/jan/25/world/la-fg-tunisia-envoy-20110126

[16] Zalmay Khalilzad, Democracy in Tunisia is just the start, The Financial Times, 19 January 2011: http://www.ft.com/cms/s/0/552d3632-2405-11e0-bef0-00144feab49a.html#axzz1C08RDtxu

[17] Press Release, Freedom House Announces New Chairman, James Woolsey, Freedom House, 13 January 2003: http://www.freedomhouse.org/template.cfm?page=70&release=124

[18] FH, Board of Trustees, Freedom House: http://www.freedomhouse.org/template.cfm?page=10

[19] NDI, Board of Directors, National Dmeocratic Institute: http://www.ndi.org/board_of_directors

[20] William Blum, Rogue State: A Guide to the World's Only Superpower, 2000, p. 180

[21] NED, Board of Directors, the National Endowment for Democracy: http://www.ned.org/about/board

[22] Deborah Pasmantier and Sonia Bakaric, Freedom and worry a month after Tunisia uprising, Montreal Gazette, 13 February 2011: http://www.montrealgazette.com/news/TUNISIA+MONTH+LATER/4274347/story.html