viernes, 14 de enero de 2011

EL PRESIDENTE OBAMA MARCA EL FIN DEL SECTARISMO QUE HA IMPUESTO EL TEA PARTY

Obama en Tucson

El discurso del presidente puede marcar el fin del sectarismo que ha impuesto el Tea Party
14/01/2011

Barack Obama ha conseguido conmover a una mayoría de norteamericanos con un discurso en Tucson sobre la matanza perpetrada por Jared Lee Loughner, en la que resultó herida la congresista demócrata Gabrielle Giffords. Sobre ese mismo suceso, Sarah Palin ahondó aún más la división entre sus defensores y sus adversarios. Los efectos opuestos de una y otra intervención tienen que ver con la experiencia, la formación y las habilidades retóricas de ambos protagonistas, entre los que no cabe comparación personal ni institucional digna de tal nombre; pero tienen que ver, además, con dos modos irreconciliables de entender la política.

La matanza de Tucson fue obra de un joven al que la policía calificó de "inestable". Si su crimen ha conmovido a Estados Unidos es porque el clima político auspiciado por el Tea Party hacía verosímil que se tratase de un atentado político.

Que finalmente resultase ser la acción de un perturbado ha permitido a los norteamericanos un suspiro de alivio, pero les ha empujado a una obligada reflexión sobre los límites del debate político. Para el Tea Party todo valía antes de la matanza y, a juzgar por sus reacciones, también después, cuando sus representantes se presentaron como víctimas de una clase dirigente que traiciona las esencias de la nación. Para Obama, los demócratas y la mayoría de los republicanos, el debate político no se propone distinguir entre buenos y malos norteamericanos, sino entre mejores y peores argumentos.

El discurso de Obama en Tucson podría marcar un punto de inflexión que liberase a la política norteamericana de la espiral de sectarismo al que la ha arrastrado el Tea Party. El presidente estuvo a la altura que requería la ocasión, lo mismo que el Partido Republicano al sustituir en el Congreso una votación contraria a la reforma sanitaria, la bestia negra de los seguidores de Palin, por una moción de condena de la matanza. Pero no se puede subestimar la capacidad de un movimiento que, como el Tea Party, prefiere los eslóganes a los argumentos.

Cuando Palin recurrió a una expresión como "libelo de sangre" en respuesta a quienes la responsabilizaban directa o indirectamente de lo sucedido en Tucson, no pretendía solo colocarse en el lugar de los judíos perseguidos, sino también identificar a sus adversarios con el nazismo, contra el que cualquier medio parece legitimado.


Si la reflexión sobre los límites del debate político abierta tras la matanza de Tucson no consigue aislar al Tea Party, puede que la democracia norteamericana no tarde en enfrentarse a uno de sus recurrentes capítulos oscuros. Hasta ahora, los controles ejercidos por las Cámaras, la justicia y la opinión pública siempre funcionaron, y es de esperar que en esta ocasión también lo hagan. Pero no será trivializando la virulencia de los discursos del Tea Party, ni minusvalorando la eficacia de sus eslóganes, como se ponga freno a su creciente presencia en la vida pública de Estados Unidos.

http://www.elpais.com/articulo/opinion/Obama/Tucson/elpepuopi/20110114elpepiopi_1/Tes

jueves, 6 de enero de 2011

LOS COMPROMISOS ECONOMICOS PARA EL 2011 DE LA REP. DOMINICANA

Los compromisos económicos 2011


Bernardo Vega



El acuerdo con el Fondo Monetario Internacional obliga al gobierno a poner en ejecución este año una serie de compromisos:

1. Reducción de los déficits del sector público, incluyendo los de la CDEEE.

2. Para marzo tener listo un análisis costo-beneficio sobre las exoneraciones que se otorgan bajo diferentes leyes, incluyendo las de incentivo, con el fin de reducirlas, a tiempo que se determina quién podría otorgarlas. Poniendo en ejecución esa política y logrando que 24,000 bancas de apuestas paguen más impuestos y se indexen los combustibles, es que los ingresos tributarios podrán aumentar en un 12%, como lo establece el presupuesto.

3. Modificar, para marzo, la ley monetaria y financiera para eliminar impedimentos legales y lograr poner en ejecución los principios básicos de las normas de Basilea (¿incluyendo Basilea III?) para que la supervisión bancaria sea en base al riesgo.

4. Presentar al Congreso, antes de marzo, una nueva ley sobre supervisión consolidada, no sólo de los grupos financieros, sino también de los grupos industriales. Indudablemente el CONEP opinará sobre esto último.

5. Para junio las tres distribuidoras de electricidad deben haber aumentado el número de sus clientes que pagan luz de 1.9 millones en la actualidad a 2.1 millones. Además, la CDEEE debe adoptar a principios de este año una tarifa indexada flexible que refleje los costos de generación, cosa que debió haber hecho en diciembre, cuando lo que se hizo fue aumentarla en 11%. Una mayor cantidad de clientes pagando una tarifa mayor es lo que lograría aumentar los ingresos de la CDEEE en un 21%. Los ayuntamientos también tendrán que pagar la luz. Todo esto es lo que permitiría reducir el aporte del gobierno a la CDEEE del equivalente de US$706 millones en el 2010 a tan sólo US$360 millones en el 2011.

6. La cantidad de familias que recibe el subsidio condicionado bajo “Solidaridad” debe aumentar para el próximo diciembre en 60,000, para llegar a 590,000. Para esa fecha las familias que reciben el subsidio del “bonoluz” deben aumentar en 100,000, para llegar a 250,000.

Para lograr todo lo anterior el país aumentará su deuda pública, tanto externa como interna, por un monto equivalente al déficit del gobierno, para así poder financiarlo, pasando la deuda pública de un 41.3% del PIB a un 42%. Aumentará con relación al año 2010 el valor de los préstamos desembolsados para proyectos financiados por bancos comerciales, sin transparencia (ver el triste listado de los mismos en el addendum del presupuesto). También aumentará el valor de las emisiones de bonos en pesos y el valor de los préstamos que el gobierno tomará de bancos locales. En síntesis, aumentará mucho la dependencia en el financiamiento local y en préstamos externos caros.

Por otro lado, y siempre con relación al 2010, nos endeudaremos por montos menores con Venezuela y se recibirán menos recursos del FMI, del BID y el Banco Mundial. En síntesis, se reducen los préstamos blandos. También se reduce la emisión de bonos soberanos.

El Banco Central verá aumentar su déficit resultante de la quiebra bancaria del 2003. Como en el 2010 la tasa de inflación fue superior a la de la devaluación, la tasa de cambio real efectiva se apreció en un 2.7%, lo que perjudica las exportaciones y la competitividad. Algún ajuste compensatorio tendrá que tener lugar en el 2011 pero, si fuese de un 6%, por ejemplo, sólo significaría que el tipo de cambio llegaría a 39.74.

El reto mayor del gobierno es restringir su gasto de manera que logre operar dentro de los déficits previstos en el acuerdo, cuya primera revisión será en marzo. Por el lado de la balanza de pagos la cosa luce bien, a no ser que el petróleo siga subiendo, pues tanto su previsión como la del gasto público, presumen petróleo a 80 dólares y ya está en 91.

Santo Domingo, R.D., miércoles, 05 de enero de 2011.http://hoy.com.do/opiniones/2011/1/4/356441/Los-compromisos-economicos-del-2011http://www.presenciadigitalrd.blogspot.com/2011/01/05/opinion/Los-compromisos-economicos-del-2011

miércoles, 5 de enero de 2011

SEGUN NOAM CHOMSKY: " LA INTEGRACION DE LATINOAMERICA ES EL REQUISITO PREVIO PARA LA INDEPENDENCIA REAL"

Noam Chomsky: “La integración de Latinoamérica es el requisito previo para la independencia real”

Noam Chomsky es un hombre tocado por una curiosidad inagotable. Debería añadirse que es un intelectual comprometido. Esto parece obvio pero no lo es. A diferencia de muchos otros intelectuales, no solo es capaz de denunciar injusticias, absurdos y atrocidades perpetradas en nombre del interés nacional de Estados Unidos o los principios del mundo libre, como la democracia y el mercado, sino también de trabar largos diálogos con quienes difieren de algunas de sus posturas políticas, sin que esto menoscabe el tejido de la conversación, sino todo lo contrario.

Más que sus ideas radicales, que de cuando en cuando revuelven la bilis de la opinión pública conservadora, lo que llama la atención de Chomsky es su capacidad casi sobrehumana de perseguir el entendimiento racional de casi cualquier problema, embebiéndose en galaxias y universos de información en los que cualquier otro se ahogaría sin la menor chance de supervivencia. He aquí lo que opina de la actualidad Latinoamericana.

Usted ha señalado que América Latina ha desafiado la hegemonía de Estados Unidos y las instituciones financieras globales que han demorado el avance democrático en la región. Es decir que los latinoamericanos, según sus palabras, nos encontramos en una suerte de momento postneoliberal. ¿Por qué cree usted que el futuro puede forjarse en América Latina?

No creo que América Latina sea la utopía. Lo que digo es que ha comenzado a emerger de una historia muy dura hacia un estadio en el que tiene algunas posibilidades. Eso no la convierte en utopía. En los últimos doscientos años, América Latina ha tratado muchas veces de salir adelante pero no ha podido hacerlo debido a tres problemas. Primero por la falta de integración entre los países, pues incluso el sistema vial es diferente entre unos y otros. También porque los países han estado orientados hacia poderes imperiales casi en todo sentido, desde los bancos en los que la gente invierte su dinero hasta las universidades a las que envían a sus hijos.

Tal dependencia se está dejando atrás y se han adoptado medidas firmes en pos de la integración. El último ejemplo es la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), creada en febrero de 2010 con todos los países de América excepto Estados Unidos y Canadá, un proyecto simbólicamente significativo y potencialmente importante. Si esa organización adquiere algunas funciones reales en la integración, será comparable con otras iniciativas como Unasur, el Banco del Sur o Mercosur… A mis ojos, la integración es un requisito previo para la independencia.


El segundo problema es interno. Todos los países de América Latina tienen una estructura social horrenda en la cual hay un pequeño sector de la población, mayoritariamente blanco, que es extremadamente rico y está rodeado de una enorme miseria. Eso no se ha solucionado, pero al menos ahora se tiene en cuenta. Los programas sociales de Lula da Silva no son la solución, pero son un avance. Lo mismo sucede con las misiones en Venezuela. El tercer punto es el surgimiento de los movimientos indígenas. Sabemos que esos movimientos son un arma de doble filo.

Por ejemplo en Ecuador, donde los indígenas preguntan por qué deben renunciar a su forma de vida para que los conductores puedan congestionar las calles de Nueva York, o en Colombia, donde inquieren por qué deben sacrificar sus hábitats por la minería. Aunque tiendo a simpatizar con esas preguntas, sé que no son cuestiones triviales. Un país tiene recursos y debe poder usarlos.

El problema es cómo conseguir que se usen en beneficio de la población, tratando de generar la menor destrucción posible del medio ambiente y evitando que los beneficios vayan exclusivamente a los inversores internacionales o a los ricos locales. Al menos estos problemas se abordan ahora de una manera diferente que en el pasado, cuando cada vez que alguien reclamaba lo aplastaban.

Otro elemento fundamental es que hay una relación Sur-Sur que antes no existía. Como prueba, China es hoy uno de los mayores inversores en la región, superando, en lugares ricos en recursos, a Estados Unidos. Si examinas en retrospectiva la política exterior de Estados Unidos, verás que el control de América Latina ha sido casi un dogma. En el Consejo de Relaciones Exteriores era común creer que si no se controlaba América Latina no se podía controlar al mundo.

Bueno, ya no la controlan. El ejemplo más notorio es Brasil. Brasil y Turquía, otro país que ha escapado del control estadounidense, se aliaron para negociar un tratado nuclear con Irán. Obama lo vio con reticencia, pero aun así lo hicieron. Pasa también en otras partes, porque el control mundial de Estados Unidos está declinando y América Latina es una pieza de importancia. Eso le abre a la región posibilidades que antes no tenía ¿Cómo manejará esas posibilidades? Aún no está claro.

¿Qué riesgos y desafíos ve usted cuando piensa en las esperanzas latinoamericanas?
El riesgo es que las estructuras que han impedido el desarrollo de las sociedades latinoamericanas aún existen. Los caudillos y el caudillismo, por ejemplo. O el hecho de que el desarrollo actual siga basado en la extracción de materias primas.

Incluso en Chile, que se considera la joya de la corona, la economía sigue dependiendo del cobre y en general sigue sujeta a una determinante geográfica que la lleva a producir frutas y vinos para el mercado estadounidense. Aparte de eso, no parece haber un esfuerzo claro y consistente para superar el sistema tradicional. La economía de Brasil también depende de materias primas extraídas para Rusia y China, si bien el país cuenta con un aparato industrial importante. El otro problema es introducir y consolidar una democracia funcional en estos países, que permita superar la tremenda pobreza y ayude a que la población participe política y socialmente.


Ya que usted menciona los problemas que trae el caudillismo al sistema democrático, me gustaría conocer su opinión actual sobre Venezuela. ¿Cuál es su apreciación del socialismo del siglo XXI y de Hugo Chávez como líder?
Venezuela es una historia mixta. Algunas de las políticas públicas, como las misiones, me parece que tienen sentido. Ha habido una importante reducción de la pobreza, que ahora podría estar creciendo de nuevo.

Además, el hecho de haber podido vencer el golpe militar y una gran huelga capitalista del sector industrial y empresarial me parece un avance significativo. Hay grandes problemas de violencia criminal, corrupción y control autoritario que deben ser confrontados y abordados. Esto sucede en el marco de iniciativas internacionales muy constructivas como Petrocaribe y el Banco del Sur. De modo que hay cosas positivas, pero también hay peligros.

Usted ha mostrado una preocupación constante por Colombia. ¿Qué piensa del legado de Álvaro Uribe y del nuevo gobierno de Juan Manuel Santos?
Cuando estuve en Colombia, hace algunos meses, la Defensoría me llevó a visitar algunos pueblitos aislados y peligrosos cercanos a La Vega, en el Cauca. Fui porque los habitantes de la región dedicaron un bosque a la memoria de mi difunta esposa, Carol. Allí los pobladores estaban tratando de bloquear los esfuerzos de compañías mineras que con su explotación arbitraria han contaminado las fuentes de agua. Por ejemplo, y esto es algo que yo no sabía, aparentemente el gobierno está tratando de privatizar el agua.

Y lo hace tomando en cuenta la lección que dejó el fiasco de Bolivia. Es decir, no como un esfuerzo a nivel nacional, sino en pequeñas zonas, aislando a las comunidades y anulando su capacidad de acción conjunta. Contra eso, la gente de muchas de las comunidades que visité se está organizando y tiene programas hidrológicos muy sofisticados, principalmente para resistir la privatización así como la destrucción de los bosques vírgenes.

Es una tendencia alrededor del mundo resistir la presión de las compañías multinacionales. Que puedan lograrlo, está por verse.
Al mismo tiempo, la gente de la Defensoría me comentó que ha resurgido la violencia, en parte por la acción de las Farc, lo que ha producido una respuesta militar y paramilitar. El padre Javier Giraldo, una persona increíble, estaba con nosotros investigando para un libro sobre lo que ha pasado con las comunidades de paz como San José y Apartadó que, tal vez sepas, han sido atacadas e intimidadas por largo tiempo. Incluso la última vez que estuve allí hace algunos años, San José, que es la más grande, estaba sitiada.

La situación ha empeorado, con lo que virtualmente se han eliminado estas islas de paz. Me parece que eso no luce bien. Para volver a tu pregunta, los grupos de derechos humanos con los que hablé esperan que con Santos haya un relajamiento. Esto no lo puedo asegurar porque proviene de una fuente secundaria, pero la esperanza es que aunque Santos continúe aplicando algunas políticas de Uribe, se supone que por su clase social –él es un oligarca mientras Uribe viene de una clase media antioqueña– y porque no necesita las conexiones soterradas con el paramilitarismo y el narcotráfico que hubo en el gobierno uribista, será menos brutal en materia de derechos humanos y más abierto al diálogo.

Las relaciones entre EE.UU. y América Latina
Aprovechando que ha tocado un tema controversial, quisiera preguntarle cuál es el estado actual de las relaciones entre Estados Unidos y América Latina.
Latinoamérica se está moviendo hacia algún tipo de integración, lo cual, como he dicho, es el requisito previo para la independencia real. Esto es muy importante porque es la primera vez, en cinco siglos, que se dan tales condiciones. No sé si llegará a trascender, pero me parece que si la Celac se transforma en algo más que un proyecto en el papel, puede ser muy positivo.

Lo mismo puede decirse de la propuesta de despenalizar algunas drogas llevada a cabo por la Comisión Latinoamericana sobre Drogas y Democracia, encabezada por los ex presidentes Ernesto Zedillo, Fernando Henrique Cardoso y César Gaviria. Si América Latina coincide en salir de esa guerra destructiva contra las drogas, podría haber un avance importante en ese terreno. Por supuesto que eso implicaría un gran esfuerzo educativo en Estados Unidos.

Para dar un ejemplo, repito algo que escuché esta mañana en la National Public Radio mientras manejaba hacia acá. Discutían lo que sucede en México y las declaraciones de Hillary Clinton sobre una insurgencia que amenaza a Estados Unidos. Había un puñado de expertos en el tema. Era muy interesante oírlos, pero no mencionaron las únicas tres cosas que realmente importan. Primero: que las armas de los narcos mexicanos llegan de Estados Unidos. Segundo: no se concentraron, aunque lo refirieron de pasada, en que la demanda proviene de Estados Unidos.

Y tercero: se les olvidó decir que los acuerdos de libre comercio son un gran lío, en particular el tlc con Canadá y México, pues han empujado a los campesinos fuera de su tierra y ha desplazado cultivos como el maíz para la producción de opio. Pocas semanas atrás estuve en México y gente ligada al periódico La Jornada me comentó que hay grandes áreas en el norte dedicadas a la producción, zonas incluso vigiladas por militares. El asunto de fondo es que, al parecer, un 25% de la economía mexicana depende de los narcos.


Otro tanto depende de las remesas que llegan del exterior, lo que quiere decir que la economía productiva y funcional se ha reducido. Incluso las maquiladoras multinacionales, que no se ajustan a los patrones nacionales de la economía productiva, se están yendo del país debido a la competencia de China.

Nada de eso se mencionó en el programa radial, así que la percepción del fenómeno que tenemos los estadounidenses es muy limitada. Por otro lado, según varios estudios económicos, el declive de la calidad de vida bajo el mandato del presidente Calderón es terrible. No hablo solo de los niveles de nutrición, sino de la caída de los salarios. Eso también es crucial para entender el avance de la economía de las drogas.

En el World Economic Forum se ha discutido otro fenómeno derivado: la paradoja de que en un país con ese tipo de violencia la bolsa se encuentre por los cielos, y haya alcanzado hace poco máximos históricos. En realidad, eso habla de dos Méxicos, uno rico y otro pobre. No hay nada paradójico al respecto. Es algo que viene sucediendo desde que las reformas neoliberales de los ochenta dividieron el país.

El número de billonarios ha aumentado casi tan rápido como la tasa de pobreza. Así se explica el fenómeno de Carlos Slim, el hombre más rico del mundo, y se entiende que a la bolsa le esté yendo bien, porque los inversores estadounidenses asumen que a los sectores privatizados, a los billonarios y a los narcos les seguirá yendo bien. Mientras tanto la población colapsa. Encontrar soluciones para esos problemas exige reconocer que existen, y eso no lo vemos. Así que tenemos por delante un largo camino por recorrer. http://tribunahispanausa.com/portal/?p=11972

sábado, 1 de enero de 2011

ECONOMISTAS DOMINICANOS PREDICEN QUE LAS DEUDAS AHOGARAN AL GOBIERNO

Martínez Moya predice que las deudas ahogarán al gobierno

Al finalizar 2010 el gobierno arrastrará un déficit consolidado de RD$74,000 millones “que le obligará en el primer trimestre a echar saltos de aquí para allá y de allá para acá”, declaró el economista Arturo Martínez Moya.

“El déficit alcanzará al finalizar el año los RD$55,000 millones, pese a que el Fondo Monetario Internacional le aprobó sólo RD$47,000 millones. Si a esa cifra le sumas los RD$19,000 millones del déficit de caja, de los ingresos menos los egresos, tendrás la respetable cantidad de los RD$74,000 millones”, precisó.

Martínez Moya, coordinador de la Comisión de Políticas Públicas del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), pronosticó que las autoridades deberán el próximo año negociar bonos con el Club de París por alrededor de US$400 millones para cubrir parcialmente sus déficits.

“Hay otra alternativa. El gobierno hablará de otra reforma tributaria, que la tiene lista”, aseguró el profesional de la economía en el programa El gobierno de la tarde de la Z 101.
Según sus informaciones, el FMI entiende que en el Presupuesto la deuda es muy alta.
Reiteró que a mediados de marzo de 2011 el gobierno estará hablando con el sector privado la forma de conseguirse RD$20,000 millones.

Martínez Moya dijo que las exportaciones de 2010 fueron de apenas US$3,000 millones, con un crecimiento de un 18% frente a importaciones de un 20%.
En su intervención, el economista ironizó con las “pocas” exportaciones. “De azúcar y otros derivados apenas exportamos en 2010 US$180 millones; café y su manufactura no llegó siquiera a US$100 millones; cacao y su manufactura, apenas US$480 millones; el café fueron US$9 millones este año y el pasado (2009) US$19 millones”, comentó.

Dijo que las exportaciones no tradicionales, que llamó “de productos menores”, alcanzaron este año a sólo US$1,700 millones, mientras que el año pasado fueron US$1,030 millones.

En su enfoque, Martínez Moya desdeñó el crecimiento del 7.5% de la economía anunciado por el Banco Central
Dijo que la construcción, según dice el Banco Central, aumentó 10% “por las comesolas que trabajan en esos túneles, sin aumentar el empleo a no ser en cuatro o cinco personas, sin generar valor agregado”.

En su opinión, debe haber una relación entre crecimiento a precios corrientes y recaudaciones fiscales. Normalmente, agregó, si se crece así un 14%, las recaudaciones crecen 12%, “lo que implica que 7.8% de crecimiento económico más una inflación de 7% estamos hablando de un 14% de crecimiento a precios corrientes”.
El también dirigente perredeista dijo que “alguien está hablando mentira”. Según entiende, la economía pudo haber crecido un 4% ó 5% y que no puede ser que el año pasado creciera un 6.5% “cuando el mundo estaba en crisis”.

El gobierno, según el economista, dice otra vez que en 2010 la economía creció como en los últimos seis años “porque la gente compró una yipeta, se endeudó”. Por igual, el sector telecomunicaciones creció “porque un muchacho compró un celular y luego debió devolverlo porque no lo pudo mantener”.

El problema es que el gobierno se endeuda para hacer un elevado, un túnel, una inversipón intensiva en capital, con una comesola en que trabajan cinco empleados, mientras que (Joaquín) Balaguer hacía una carretera, un proyecto de vivienda, con intensidad en capital y en trabajo”.

Cuando dice que creció 7.5%, mientras américa latina y el caribe 6.6%. estamos por encima de Brasil,mexico, costa Rica, colombia, china, que creceerá un máximo de 6.6%.
Ese tipo de crecimiento tiene sus consecuencias, van a seguir las discusiones. El gobierno en marzo va a decir que el dinero no le alcanza porque la presión tributaria era 11 y ahora 5%.