El Presidente Danilo Medina antes un gran dilema.
El mandatario podría convocar a un plebiscito para sondear si legaliza su segunda reelección o endosar a Fernández sus porcentajes en las encuestas Conforme a los últimos sondeos de las encuestadoras Fundación Frederich Ebert, Masada y Oxfam vertidas a los medios de comunicación el 16 de este mes, el presidente Danilo Medina dispone de una valoración positiva de sus gobernados de un astronómico 65.88%, al primer año del hasta ahora su segundo mandato constitucional.
Revelan los sondeos vertidos en el estudio Ciudadanía y Democracia en la cultura política dominicana, “que apenas un 33.65% confía poco o nada en el mandatario, consignado que la Presidencia de la República es la única institución pública con mayor nivel de confianza, el único que podría calificarse alto porque tiene más del 60% de valoración”.
ADVERTISING inRead invented by Teads Prosigue el informe que la valoración al presidente Medina trepa 83.11%, porque, afirma, “escucha al pueblo con 18.50%; política de Salud 14.71% y apoyo y mejora infraestructura 14.17%”.
El PRM, que nunca ha ejercido el poder, dispone de un nivel de confianza de 16.62% femenino y 24.76% masculino, y la brizna restante del otrora poderoso PRSC un 12.96% de confianza.
Revela el sondeo, “todos los partidos políticos son iguales de corruptos, correspondiente un 27.25% al PLD, el más corrupto, sigue el PRD 18%, PRM un 5.7% y PRSC 1.6%”, empero, la apreciación de corrupción endosada al PRM es desestimada, por no haber ejercido el poder y, en consecuencia, eximido de la valoración alguna.
Los sondeos aludidos, riñen con las estadísticas que delatan que hay un porciento ciudadano amplio que se expresa contrario a esos parámetros de valoración al presidente Medina. En 17 años de ejercer el poder desde 2012 el presidente Medina, no se registra un solo caso de corrupción penalizado, imperando la impunidad como una de las grandes lacras históricas de su administración.
El casos Odebrecht, que ha conducido a prisión a los gobernantes de Brasil, Luis Inacio Lula da Silva y la destitución de la presidenta Dilma Rousseff por la trama Lava Jato; Pedro Pablo Kuczinsky de Perú, salvado de destituirlo por arreglo con la oposición para indultar al expresidente Alberto Fujimori; Ricardo Martinelli de Panamá, libre bajo fianza luego de extraditarlo desde Miami, y el más reciente, Álvaro Colom de Guatemala, en prisión preventiva con nueve ministros por el caso de los autobuses urbanos.
El problema eléctrico de los apagones prosigue en 17 años, y la solución definitiva la deposita el presidente Medina en las dos generadoras a carbón de Punta Catalina que producirán 720 megas, que la ciudadanía estima sobrevaluadas en su costo original.
Hasta el primer ministro del Estado de Israel, el súper halcón Benjamín Netanyahu es tocado y cuestionado por corrupción por recibir él, esposa y familiares, diversos regalos entre 2016-2017 evaluados en 200 mil euros, entre ellos del productor de Hollywood, Arnon Milchan, a cambio de millones de dólares de exenciones fiscales.
Es decir, que en esos países se establecen responsabilidades penales, y aquí es como si nada ocurriese en el litoral de la corrupción, que todo está bien, que se ha procedido siempre normal, una versión maniquea que a la ciudadanía no convence, porque tanta belleza genera una suspicacia del tamaño del territorio nacional, y más allá, en el Potomac.
Los sondeos contradicen el estudio de Imagina el futuro ciudadano y democracia en la cultura política dominicana, vertido el día nueve de este mes en el periódico Hoy, donde revela que el 94% encuestado cree que los funcionarios se aprovechan de sus posiciones para enriquecerse, no para “Servir al partido, para servirle al pueblo”, slogan carcomido por la corrupción.
. El Gran Santo Domingo es un caos del transporte, altos decibeles y delincuencia, revela un reportaje de El Nacional del día cuatro de este mes calzado por el foto-reportero Jorge González, donde más de 30 mil choferes de concho y cientos de autobuses conducidos temeraria y peligrosamente, caotizan el tránsito y millares de motoristas sin licencias ni placas.
La delincuencia nunca ha respondido la administración del presidente Medina de un proyecto de contención, y la invasión pacífica cada vez más acentuada de haitianos indocumentados amenaza la soberanía nacional y los recurrentes pronósticos de múltiples estallidos populares, probables este año.
La deuda pública escalada irresponsable y criminal por el presidente Medina que en 2017 concluyó en US$29,544.1 millones o un 40% del PIB y que este 2018 trepará a US431, 366.1 millones o un 46% del PIB, conforme edificó el economista Arturo Martínez Moya en su columna de cada lunes en Hoy del día doce de este mes, será un eterno baldón para el presidente Medina y para el PLD.
El presidente Medina tiene de contrapartida a su favor las visitas sorpresas; Tarjetas Solidaridad; prima del dólar controlada a menos de 50 por 1 y PIB sobre 4%, dos records increíbles en 17 años.
Ante todo ese panorama asaz conflictivo y peliagudo, pero solo ateniéndonos a los sondeos citados, el presidente Medina tiene de frente al certamen 2020 dos alternativas,
consistentes en convocar un plebiscito para sondear si legaliza su segunda reelección, o de no hacerlo o hacerlo y no prosperar, endosarle los porcentajes de las encuestadoras, de continuar altos, al expresidente Leonel Fernández, como una forma del PLD proseguir a horcajadas del mando supremo hasta 2024. ¿Comprende, compañero?, conforme reiteraba el expresidente Juan Bosch cuando concluía explicar un tema.
Enildorodriguez@yahoo.es
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